Behind.

Un trozo de espejo, un vaso con agua, una canica que no sabe girar, unos gritos envasados al vacío que nadie quiso nunca escuchar, una mirada en una cámara de fotografía, una gran bola de cristal que refleja el cielo, un arcoiris pintado en un trozo de servilleta, dos palabras escritas con rotulador en el marco de una puerta, un nombre, una sonrisa, una canción, siete frases de siete palabras, miles de listas de cosas que nadie entiende;
papel y un bolígrafo.

sábado, 7 de julio de 2012

"Ausentes y desvanecidos".

Creo que somos raros. Que los dos nos callamos por miedo a las consecuencias que puedan traer consigo nuestras palabras, pero tú callas más que yo.
Y lo sé y me molesta. Antes no callabas tanto, dejabas fluir tus palabras, aunque fuera por escrito, solo para esperar una contestación mía que sonara convincente.
Odio no poder decirte que sé que pasa algo aunque intentes convencerme de lo contrario.
No importa, la verdad. No me molestan tus silencios, no me hacen sentir enfadada. Solo me dan un poco de miedo, me confunden. Y como tú no dices nada yo interpreto libremente.
Esto no debería estar aquí escrito, tengo a mano mi libreta de Londres en la que podría dejar detallado como tantas otras veces lo que pasa en mi cabeza y que no te enteres.
Tal vez quiero que leas esto, me da curiosidad por saber si a estas alturas ya te sientes aludido, quizá enfadado u ofendido porque no he sido capaz de ir hasta ti y vomitarte mis miedos en forma de palabras.
Pero te habrás dado cuenta  de que me ocurre algo, o tal vez no; solo estoy mal cuando no estoy contigo y me da por pensar. Me creo mis películas y paranoias mentales. Ya sabes como soy, lo sabes muy bien...
El humo es un consuelo cuando intento dejar por escrito de la manera más decente mis palabras de "no estoy bien, pero no te preocupes, lo estaré".
Supongo, también, que si no te hablo más a menudo cuando no estás a mi lado es solo porque se que ya no tengo nada que decirte que no sepas o intuyas. Imagino que a ti te pasa lo mismo, pero no lo sé y me da rabia.
Y cierro los ojos, intento no ver el final. Y a lo mejor me choco contra una pared de frente y acabo tirada en el suelo, culpándome de no ser más prudente.
Eres diferente, a tu manera, tan especial tan "a trocitos". Y a pesar de tus pequeños fallos y mis grandes rayadas, estás ahí eres lo único más o menos  estable en mi caos mental, por favor, no desaparezcas.
Que tal vez tengas razón y todas esas movidas que nos pasan nos harán más fuertes. Si pasara lo contrario, en este momento, no sé que haría. Como reaccionaría o que te diría, en el caso de poderte decir algo.
Y que, aunque no lo diga, sabes de sobra que te quiero.
Coge esta información y asimílala como quieras. Es tuya, un subproducto de lo nuestro.
Y lo siento, de verdad si te hace sentir mal. Si llegas a leer esto y te sientes decepcionado o enfadado conmigo por no ser más valiente y mirarte a la cara para explicarte que he estado mal y que no te pedí ayuda.

No tenemos demasiadas fotos juntos. Supongo que no las necesitamos, que se hacen para que el resto de gente sepa que todo va bien. Y a nosotros nos vale con ser conscientes, en nuestra pequeña intimidad de ello.
Te lo repito si lo necesitas, te quiero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario