Behind.

Un trozo de espejo, un vaso con agua, una canica que no sabe girar, unos gritos envasados al vacío que nadie quiso nunca escuchar, una mirada en una cámara de fotografía, una gran bola de cristal que refleja el cielo, un arcoiris pintado en un trozo de servilleta, dos palabras escritas con rotulador en el marco de una puerta, un nombre, una sonrisa, una canción, siete frases de siete palabras, miles de listas de cosas que nadie entiende;
papel y un bolígrafo.

jueves, 6 de diciembre de 2012

Causando desperfectos.

No eres mi foto favorita, ni las palabras precisas, no eres casi ni un instante en mi memoria. Te reto a aparecer en mis sueños y desarmarme del todo. Desarmarme, si, dejarme sin habla y sin aliento. Y sin saliva en los labios de tanto besarlos. Estoy convencida de que puedes hacer que no piense más y solo precisas tus manos. Interprétame esta noche, entre miradas desconocidas por las calles. Ellos nos ven, nosotros vamos ciegos. Reinventa, por favor, el concepto que tienes de mi. Te juro que si supieras un poco más no me dejarías sola, te juro que si supieras un poco más estos tragos te sabrían distintos. Más amargos aún, si eso es posible. Acaricias las heridas de mi alma con tus palabras que no parecen querer compadecerse de mi, ni hundirme más, ni llegan con el espíritu típico de "necesidaddesabercosasquenoteimportan". Solo usas tus palabras como un bálsamo, las aplicas en mi pecho con suavidad; manos de seda rozando mis ideas con forma clara de voz calmada, pausada. Transmites a mis pulmones sensaciones lumínicas de todos los colores, no solo verdes. Un gesto de esas manos me llevaría a la perdición. El mismo gesto podría quitarme la soga del cuello en el momento justo. Una necesidad como otra cualquiera. Como el alcohol en la garganta o la yerba en los pulmones. No dejas de ser una adicción, pero me jugaría todas y cada una de las partículas que me componen a que eres el doble de tóxico, aunque no te molestes demasiado en disimularlo.
Si te quedas prometo adjudicarte ahora mismo una canción, la próxima que resuene en mi caja torácica, esa misma será tuya para siempre. Porque careces de rostro, eres solo un torso, unas manos y unas ideas latentes. Suficiente, al fin y al cabo lo único que necesito de ti, de momento, es eso. Palabras.
En un futuro podríamos negociar otras situaciones para nosotros, hoy somos letras en mi teclado, en mis dedos. No hay pretensiones.













No eres mi nada, pero esta noche podríamos cambiar todo eso.

3 comentarios:

  1. El grado de toxicidad que pueden alcanzar los sueños es directamente proporcional a las nefastas consecuencias del consumo de cigarrillos: pequeños placeres, un juego de ruleta. Pasaba por aquí. Me gusta tu estilo, tus símiles; vas bien encaminada.

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  2. Gracias por aparecer. Siempre está bien saber si que se agrada.

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  3. Como siempre te he dicho, sublime.
    FDO: Rox

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