Colores.

Lo sé, lo sé... pero no se.

Y no es cuestión de disimular o de decirlo con más discreción. El problema es simplemente decirlo.

No soy del tipo de personas que admite cosas o las exterioriza. Bueno, a lo mejor es lo que me gustaría ser.

Y no se si lo consigo, suelen decirme que para que vivo si no quiero sentir nada.

Me gustaría decirle lo que me pasa por la cabeza en realidad. Que está muy bien hablar durante horas y horas, si. Pero que en algún momento tendré la necesidad de usar mi lengua para algo que no sea hablar.

Que yo también tengo mono de caricias y susurros, de besos en la espalda y de mordiscos en el cuello.

Y que aunque no te lo creas, a mi también me gustaría estar en ese otro lado.

Vuelves a empezar. Recomienzas como si te gustara ver que los demás te estamos esperando.

A mi no me gusta esperar, no tengo paciencia y tú no pareces estar molesta de que yo no espere gran cosa.

Así que corre y vete, que ya tenemos una edad como para saber de sobra a quien aguantar y a quien no.

Y yo se muy bien que no tengo que aguantarte nunca más.

Intento entenderte por que se que en relidad no existen tantas diferencias, que los años y las vivencias no pueden ser tan diferentes. Y quiero entenderte.

Y entiendo tu música, tus gestos, tus suspiros y tus miradas. Y entiendo tus textos y tus carcajadas.

Pero a ti no, a ti no te entiendo.

Y se que no eres tan complicado, aunque finjas serlo. Por que yo también lo finjo.

Se que no te entiendo por que ni tú te entiendes, por que yo no me entiendo.

Que a mi también me jode estar mal, pudiendo estar todo en su sitio.

"Tienes todo un verano para hacer de todo."

Se me queda pequeño. No me dará tiempo a hacer todas las locuras y gilipolleces que me rondan el coco.

Se está perdiendo todo en un suspiro y quema y duele.

Se escapa el tiempo y yo solo puedo pensar "¿Que estaría yo pensando hace un año en este día?"

Que recuerdo las fechas, que me las he grabado todas.

¿Tienes miedo?

¿Y por eso te escondes y huyes? 

¿Por eso te callas y miras como pasan las oportunidades, por eso pintas tus sonrisas de colores aunque en el fondo estés temblando, por eso retienes cada palabra esperando que su significado te haga reaccionar?

¿Tienes miedo?

Pues te voy a decir una cosa; yo siempre tengo miedo. Y no es una buena manera de vivir.